Para que nos entendamos Johnny se
lo explicará a la Jenny:
- Hostia tú, llevo
un pelotazo que flipas, voy to ciclao tía.
- ¡Que te
callehss…!Troncooo, no me la líes; ¿qué te has “metío”?
- Pues flipas,
una droga to’ destroyer mazo guapa, más a tope que el Red bull - Vodka. Te pones los cascos ahí to guapos en las orejas
que pim que pam, te bajas un programa para petarle a la música que han diseñao
unos tíos mazo guapa y te pones a tope de subidón! ¡Vamosssss!
- ¡Como lo
parte el Johnny! ¿¿¿Y lo peta???
- Te lo
explica ahí to de puta madre el Conde Chócula.
Veamos, I-Doser tiene un
funcionamiento relativamente sencillo. La explicación más básica es que esta
música contiene unas malignas ondas binaurales que se sincronizan con las ondas
cerebrales provocando estados alterados de la consciencia tales como los de las
drogas. Ellos crean archivos de audio
con dichas ondas mezclados con música de fondo sobre la temática del efecto. Se
deben escuchar entre 10 y 60 minutos para notar los presuntos efectos. La web
de los creadores tiene una carta para elegir el colocón de la droga que el
cliente desee, tales como la marihuana, el peyote, la morfina, la cocaína, ¡hasta
orgasmos! También ofertan estimuladores para frikis que potencian la habilidad
en los videojuegos; para esotéricos
y demás meditadores con deidades ofrecen dosis
celestiales; e incluso para diseñadores que necesitan inspiración.
Enlace a la web oficial > http://www.i-doser.com/sample.htm
Archivos de muestra > http://www.i-doser.com/sample.htm
El sibilino y curiosioso lector
estará pensando que si es una droga digital es una fuente infinita e infinitamente
divisible de colocones, que además no tiene efectos secundarios. Además no hay ninguna legislación que regule este tipo
de drogas por lo que es totalmente legal consumirla en un parque infantil a las
6 de la tarde. Pero quizá esto sea algo más complicado, ya que tampoco hay una
legislación que prohíba el uso de móviles o cualquier aparato que funcione en
bandas de frecuencia de 2.4 GHz. La cuestión está clara, ¿funciona de verdad?
- ¿Qué hacen aquellos, se están drogando? - ¿Quién sabe? Era mejor cuando eran los perros! |
Repasemos la explicación:
- “(..) esta música contiene unas malignas ondas binaurales (..)”.
Bien, ¿qué son esas aterradoras
ondas binaurales? Una señal binaural quiere decir que goza de la BI-auralidad,
es decir, (bi) doble (aural) sonido. Los sonidos binaurales son los que
permiten al ser humano localizar un sonido en las tres dimensiones. Esto se
debe a que tenemos dos oídos por los que llega el mismo sonido pero en formas
distintas. Por ejemplo, si alguien da una palmada a mi derecha a mi oído
derecho llegará el sonido de forma directa, pero en el izquierdo se creará una
sombra producida por mi propia cabeza que deformará el sonido real además de un retardo, y el
cerebro (que es más listo que el hambre) interpretará esa sombra y ese retardo en el oído
izquierdo junto con el sonido directo del derecho, como que el sonido
inevitablemente se encuentra a mi derecha.
Por tanto, un sonido binaural es una señal que cuenta con dos componentes de
sonido distintas que interactúan entre sí, dándole la suficiente información al
cerebro para que este los entienda. ¿A que ya no son tan malignas estas
ondas?
Ampliación: Los
sonidos binaurales se basan las HRTF (Head Related Transfer function) Efecto
Hass, retardo temporal, longitud de onda y enmascaramiento.
- “ondas binaurales que se sincronizan con las ondas cerebrales provocando estados alterados de la consciencia”
A una persona que le digan que la
música se sincroniza con las ondas cerebrales de su cabeza le puede sonar a que
quieren venderle una pulserita para mantener el equilibrio con los polos
magnéticos terrestres. Las ondas cerebrales son la actividad eléctrica que
produce el cerebro. Estas ondas se clasifican según la frecuencia a la que
funcionan y son alpha (8-12 Hz), beta(rango muy alto),
theta (3.5 y 7.5 Hz), delta (1-3 Hz) y gamma (40Hz). Si os fijais todas
esas ondas están en rangos muy bajos de frecuencia; son frecuencias inaudibles
para el oído ya que este detecta entre 20 - 20.000 Hz. De lo que se trata es de
hacer “trabajar” al cerebro en ese rango de frecuencias para conseguir potenciales evocados, que son los que
modifican el potencial eléctrico producido por el sistema nervioso en presencia
de estímulos tales como los sonoros o visuales. ¿Cómo? Con los pulsos binaurales. ¿Y qué son
estos pulsos binaurales? Como ya sabemos una señal binaural consta de la mezcla de
dos señales distintas. Bien, pues un pulso binaural es un efecto que se crea al
reproducir dos sonidos de frecuencias muy cercanas pero no iguales.
Ejemplo: Por el oído
izquierdo suenan 400 Hz; por el derecho suenan 410 Hz. El cerebro analiza esos
dos sonidos aislados y detecta uno nuevo que serían 10 Hz.
Esto ocurre porque son señales
periódicas, son muy cercanas y trabajan a frecuencias distintas, pero llega un
momento en que la forma de sus sinusoides coincide. Cuando esas dos formas
coinciden es como si solo sonara una, que se vuelve a repetir con una frecuencia
de 10 Hz. Dicho de otra forma, un ciclo de onda de 400 Hz se repite cada 0.0025
milisengudos y uno de 10 Hz cada 10 milisegundos. Cuando suenan 400 Hz y 410 Hz
sus ciclos de onda coinciden cada 10 milisegundos haciendo sonar 10 Hz. Pero en
la realidad esta teórica señal de 10 Hz ¡¡no
existe!! La ha creado el cerebro
y por tanto ya hemos conseguido que, presuntamente, las ondas cerebrales trabajen a la
frecuencia que queremos.
Avance de una señal de 400 Hz con respecto a otra de 410 Hz (Material del autor) |
Pero, ¿qué ocurre si intentamos
escuchar esos sonidos llenos de "drojaína" con altavoces? Pues que las señales se
mezclan naturalmente. El oído previamente enmascara las señales y luego el
cerebro las integra. No es un sonido binaural y por tanto necesitamos unos auriculares.
Bien, ya hemos explicado el funcionamiento físico del I-Doser. ¿Es posible entonces que pueda recrear la euforia de esnifar coca? ¿O la de orgasmar? Según la comunidad científica y citando a Steven Novella, los pulsos binaurales no pueden producir un estado alterado de conciencia. La música es muy poderosa y puede tranformar los estados de ánimo de las personas; a todos nos ha pasado escuchando una canción triste , agresiva o “buenrrollista”, pero todo esto es creado por el ánimo de cada uno y las necesidades que le crea al cuerpo. La cuestión es que los efectos de I-Doser difícilmente pueden conseguir marearte y darte hambre como si te hubieras fumado un porro de marihuana. Pueden realmente alterar las ondas cerebrales, pero no fuera del funcionamiento normal del cerebro. Es por tanto un PLACEBO en toda regla, ya que no hay pruebas de la supuesta sincronización con las ondas cerebrales.
A raíz del boom drogadíctico digital
ha surgido una alarma social adherida al desconocimiento. Se ha creado una web
encargada de informar sobre los efectos perjudiciales de estas drogas. De hecho
afirman que pueden provocar disfuncionalidades cerebrales de por vida. La
señora que lo administra es una madre que ve como su hijo aqueja dispersión
mental por culpa de las drogas. De hecho lo han hecho varias pruebas para
detectar daños cerebrales en los que no hay signo ninguno de ellos, pero la valiente
madre afirma que no parará hasta dar con los resultados correctos, los que
demuestren que su hijo es idiota está enfermo.
También han armado revuelo grupos
como Biosphere que según el colectivo están consiguiendo el control mental mediante los pulsos
binaurales en sus canciones.
Si quereis ver vídeos de muchachos teniendo delirios podeis verlos googleando "I-doser". Y si quereis leer las sensaciones que ha experimentado la gente se ha creado un blog para ello aquí.
Sinceramente prefiero el tono de móvil que inventó un señor japones llamado Hideto Tomabechi, que hace que le crezcan las mameyas a las mujeres.
Sin más dilación se despide uno
que ha escrito todo esto escuchando canciones de Biosphere. Voy a por una
aspirina…
Por Conde Chócula (Aresti)
Fuentes:
http://www.ojocientifico.com/3902/i-doser-una-droga-virtual-y-legal
http://theness.com/neurologicablog/index.php/digital-drugs-do-not-cure-stupidity/
http://es.wikipedia.org/wiki/Potenciales_evocados
http://es.wikipedia.org/wiki/I-Doser
Esta mierda hay que leerla escuchando Idoser, que si no, no mola.
ResponderEliminarArtículo cojonudo, que además pone en claro que un producto no es famoso hasta que no hay un blog de una madre tachándolo de satánico.
pero como nos engañan las resdes.
ResponderEliminarLas madres deberian estar mas informadadas antes de acusar de falsas enfermedades frente a la realidad del descontrol en la educacion, de sus hijos y del propio. El articulo es magnifico y esclarecedor, un buen filtro ar poder explicar paranoias.
Gracias conde.
A mi también me sonaba a pseudociencias, pero un día lo probé en serio y flipando me quedé por el resultado... esos efectos no los consigue ningún placebo.
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